Los alumnos, sobre todo los de Infantil, se quedan alucinados cuando el maestro hace magia quitándose el dedo pulgar de la mano.
Pero más sorprendido se quedó el maestro cuando un alumno le dijo:
- Maestro haz magia y quítale a este niño los dos dedos para curárselo bien. (Se refería a un compañero que tenía dos dedos de la mano con un corte e hinchados como consecuencia de un porrazo).
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